1.EL ARTE UNA NOCIÓN ABSTRACTA

PENDIENTE EGIPCIO, MUSEO DEL CAIRO
El turista que se encuentra en Roma y acude al coliseo tiene ante sus ojos uno de los monumentos más destacados del arte de la antigüedad. El universitario que estudia la colección de cerámica griega en el museo británico toma como base de su trabajo unos objetos artísticos. El hindú que sacrifica un cordero ante la estatua de la diosa Kali se halla, tal vez sin reparar en ello, frente a una obra de arte. El coleccionista en una sala de subastas puja por un cuadro de Picasso trata de adquirir una obra del maestro más representativo del arte del siglo XX. La diversidad de objetos que reciben el calificativo de artísticos y las diferentes actitudes que se adoptan ante ellos nos llevan a formularnos una pregunta ¿Qué es en realidad el arte? Sin embargo, las esperanzas de obtener una respuesta satisfactoria se disipa cuando nos damos cuenta de la variedad de definiciones posibles, y más aún cuando observamos cómo han cristalizado las opiniones sobre el arte y lo artístico a lo largo de la historia de la humanidad. La gran diversidad de cuestiones planteadas en torno a este tema y la multitud de respuestas que han suscitado son suficientes para confirmar la opinión, extendida entre muchos estudiosos, de que no es fácil, ni acaso posible, llegar a un acuerdo aceptable. Porque sucede que cuanto más se apuran los goces de la vivencia artística, más parece resistirse el arte a los mecanismos de la razón que pretende aprehenderlo.

Cuando contemplamos una obra que se considera artística y emitimos una opinión acerca de ella, manejamos implícitamente una idea de arte que, cuando pretendemos explicarla, pocas veces coincidirá con la que maneja otra persona o con las que podamos encontrar en los diferentes tratados de estética, rama del saber humano que estudia todo lo que se refiere al arte y a la belleza.

Pero no debemos eludir la pregunta sobre la naturaleza del arte: el mundo del arte es un  laberinto y solo podremos saber adónde conduce o que se encuentra en su interior si permanecemos en él y tratamos de orientarnos a través de las obras que, por convención social y cultural, damos por supuesto que son artísticas.

CALENDARIO AZTECAMUSEO DE ANTROPOLOGÍA DE MEXICO
Frente a la actitud tradicional que trata de encontrar una respuesta capaz de zanjar la cuestión de una vez por todas, la experiencia y la historia aconsejan reconocer abiertamente que no es posible definir la naturaleza del arte de forma expeditiva, el arte a diferencia de la ciencia, no puede rendirse a un conocimiento claro y distinto de su objeto. Si muchas veces experimentamos una cierta sensación de fracaso frente a él, no es tanto por incompetencia como por desmesurada ambición, por enfrentarnos a las obras artísticas como si fueran objetos de precisión.  En este sentido, el arte lanza continuamente un reto a nuestra capacidad reflexiva: el de traducir a esquemas conceptuales precisos algo que los desborda o que incluso los burla y contradice abiertamente. Y el problema se complica a causa de las características de una época como la nuestra, impregnada por hábitos derivados de las ciencias exactas y de la tecnología e interesada por fines eminentemente utilitarios o por las obras de arte como mercancías. Es evidente que en la actualidad el arte se encuentra en inferioridad de condiciones para competir con la ideología dominante. El propio hecho de afrontar esta cuestión inicial mirando de un modo racional algo que ya hace tiempo se deslindó de lo lógico, aunque sin eliminarlo totalmente, condiciona nuestra comprensión del arte. Además, la distancia que media entre la vivencia artística y el análisis supone un obstáculo que puede desanimarnos nada más iniciar la singladura.

EL LAVATORIO, TINTORETTO, (1518 1594), MUSEO DEL PRADO

Estas consideraciones nos llevan a una cuestión de fondo: ¿y si el arte no fuera otra cosa que aquello que normalmente conocemos con este nombre? Desconcertante pregunta que, a veces, se ha sugerido como la única posible. Pero, aunque no sea del todo descabellada, en estos momentos solo servirá para desviar el tema hacia un puro juego de palabras.

El curso que hemos iniciado no pretende desentrañar la esencia del arte. Su objetivo será el de ofrecer las pistas suficientes para que la intensidad del placer que las obras de arte nos procuran no este reñida con un cierto avance en su entendimiento.



LA GUITARRA, PABLO PICASSO.

·        El arte es una noción abstracta que se aplica a una variedad de objetos de las más lejanas culturas y épocas. Los ejemplos que aquí presentamos son muestra de lo que para nuestra cultura es artístico, a pesar de que en sus orígenes no fuese considerado como tal.

·        Las referencias estéticas al pasado están teñidas por los gustos y actividades de nuestro presente, que velan y distorsionan la comprensión del arte de otros tiempos y culturas.


    Es difícil aplicar pautas racionales para comprender algo que, como el arte actual, trata de evadirse de lo lógico, aunque no sea en su totalidad.



ACTIVIDADES

Luego de leído el texto, desarrolla  las siguientes preguntas:

1. Elabora una síntesis no mayor a siete reglones de su cuaderno, donde se explique el asunto al que se refiere el texto ¨ el arte una noción abstracta¨. Luego desarrolle las siguientes preguntas.
2. Por qué crees tu, que se dice en el texto, que el arte es una noción abstracta.
3. Según el texto, cuál sería la diferencia fundamental entre arte y ciencia.
4. Por qué crees, que el texto leído critica la posición de nuestra época actual, cuando afirma que esta época le da al arte fines eminentemente utilitarios y  mercantiles.
5. Basados en lo sugerido por el texto, argumente dos razones por las cuales se expone que el arte elude en ocasiones el pensamiento lógico convergente.
6.  Con que ideas se asocia en el texto, los siguientes términos:

·       Coliseo romano
·       Diosa Kali
·       Pablo Picasso
·       Estética.

7.  Elabore un glosario con las palabras desconocidas del texto. 


VIDEOS COMPLEMENTARIOS



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